martes, 21 de abril de 2009

Re- Willkomen in Deutschland!

Hace exactamente una hora y media que he llegado a mi casa y tres horas desde que puse mi primer pié de nuevo en Alemania.

Como ya os venía contando en ediciones anteriores necesitaba un par de días de descanso en España así que el miércoles pasado decidí alocadamente comprarme un billete de avión para Madrid.

Llegué el viernes por la noche con mis mejores seis botellas de vino, el surtido compuesto por galletas, chocolatinas varias, patatas en forma de ositos tiernos y zumos raros que Andel me había pedido (sí, de vivir aquí mi novio sería obeso) y un par de camisetas y dos vaqueros (con tanta comida y bebida no había sitio para mucha cosa!!).

A la mañana siguiente fuimos a visitar Gali. (mi piso de estudiante en Madrid en el que sólo he tenido tres ausencias: Viena, La Voz de Galicia y Alemania). Les llevé a mis compis de piso comida alemana pero solo estaba Aly y la chica que está en mi habitación (q por cierto, es de Colonia !Vaya casualidad!) pero esta última era vegetariana así que de salchichas nada...le dejamos un poco a Gus (que es el único chico de la casa y que, hoy está de cumple!) para que probase.

Por la noche bajamos por la zona de Malasaña y descubrí que Teresa era la leche jugando al Trivial y eso q ella es de bellas artes y no de periolismo!(a mí que se chapó las preguntas antes de quedar jajaja). Nos dieron las tres de la mañana!! así que todos los bares que cerraban más tarde estaban petadísimos y terminamos en un karaoke...

Mi primera y última experiencia en un Karaoke fue con más o menos doce años en un local que está justo debajo de la casa de mi hermana. Tu te sientas en tu mesa, pides tu consumición y cantas desde tu propio sitio, ahí arropada por tu gente y desde una especie de pseudo anonimato. Para mi sorpresa me encontré con un escenario!!. Parecía que estábamos en una secuencia de Cómo conocí a vuestra madre porque el decorado era el mismo!!!.

Puri y Teresa no pararon de subir y bajar del escenario y de pedir más canciones al “tan amable” camarero. Aunque tanto Ignasi como Andel o el resto se hicieron valer cuando se subieron . La pena fue que la canción de Grease que pedí no era la que nos sabíamos y que como ya era “tarde” nuestro inglés de Oxford no se hizo valer mucho.

El Domingo, como es el día del señor, hay que hacer el vago y eso fue exactamente lo que hice. Lástima que las gominolas de Madrid no estén tan ricas como las de Coruña...
El lunes tocó día de compras y paseo por la Gran Vía donde me encontré a Rebe, “la chica heineken”, (llamada así no por su considerable consumo de este producto sino porque curra allí) y por la noche fueron las cañas de despedida con Wences, Diego y Cela. Una lástima que no hubiera tiempo para más pero en dos semanas me toca volver x trabajo así que ya seguiremos con la portería...

Lo único malo ha sido levantarse dos días seguidos a las 5:30 de la mañana. Lo bueno, q siempre había una estantería a mi lado ;)

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